Nos gusta hacer deporte, es sano y hace que te sientas bien contigo mismo, pero cuidado con algunas disciplinas deportivas que tienen un alto riesgo de lesionar tus dientes. ¡Hazte de un protector bucal si practicas un deporte de riesgo!
La Sociedad Española de Odontología del Deporte (SEOD) nos da las pautas a seguir para prevenir lesiones utilizando protectores bucales:
Los protectores bucales se usan para prevenir lesiones accidentales de dientes, tejidos blandos y arcos dentales, que pueden producirse durante la actividad deportiva.
Su efectividad para prevenir accidentes está bien probada. Pueden también ayudar a amortiguar el golpe recibido en la región facial y reducir el daño producido en el cerebro y otras partes de la cabeza y el cuello.
Hay tres tipos de protectores bucales para deportistas:
- Clase I: Protectores bucales que se venden comercialmente listos para usar (stock o estándar). Son prefabricados, en goma o plástico, y se venden en las tiendas de artículos de deporte. Suelen quedar holgados, ya que se supone que se adaptan a todas las bocas. Para conservarlos en su sitio es necesario mantener en la boca cerrada y los dientes de ambos maxilares en contacto. No cumplen casi ninguno de los requisitos requeridos y se deben rechazar, ya que el deportista se cree protegido y se expone más a los traumatismos.
- Clase II: Semi-adaptables (hechos en boca directamente) que se adaptan con calor (termoadaptables). La retención, protección y comodidad es intermedia, son mejores que los de clase I aunque peores que los de clase III.
- Clase III: protectores bucales personalizados, hechos por un odontólogo según unos modelos de tu boca. (Individuales) La mayor ventaja del protector bucal para deportistas hecho a medida es que se puede individualizar el diseño de acuerdo con la anatomía de la boca y el tipo de deporte que practica el atleta. La retención, protección y comodidad es muy buena.
Requisitos de los protectores bucales para deportistas:
- Tener una retención adecuada para permanecer en posición durante la actividad.
- Permitir una relación oclusal normal.
- Cubrir el arco maxilar.
- Reproducir la anatomía maxilar.
- Permitir la respiración bucal.
- Proteger los tejidos blandos.
La propia SEOD nos advierte que los únicos protectores que proporcionan la protección máxima requerida son los individuales, fabricados por odontólogos sobre la base de los moldes de la boca del deportista.
Existen protectores bucales especiales para los que tienen tratamiento de ortodoncia, en estos deportistas el uso del protector es aún más necesario.
Los protectores de clase II son más económicos pero tienen una aplicación limitada y no se recomiendan los protectores bucales Clase I (estándar) porque no son seguros y se desprenden fácilmente.
Los deportes que requieren protección bucal según los expertos son:
1) Deportes de alto riesgo:
- Artes marciales
- Boxeo (inglés y libre)
- Fútbol (americano, soccer)
- Hockey en todas sus variantes
- Patín carrera
- Rugby
- Baloncesto
- Aladeltismo
- Lacrosse
2) Deportes de mediano riesgo:
- Equitación
- Windsurf
- Surfing
- Paracaidismo
- Gimnasia
- Squash
- Water polo
No debéis confundir el uso de este dispositivo cuya finalidad es la protección de estructuras dentofaciales, con el de férulas de descarga que tienen otra finalidad terapéutica como os expliqué en otro post.
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